Amor no tradicional (en inglés: Nontraditional Love) es una novela distópica, distópica del autor ruso Rafael Grugman que describe un futuro en el cual la heterosexualidad es declarada ilegal. Liberty Publishing House publicó la novela por primera vez en noviembre de 2008. Nontraditional Love combina la sátira con temas orwellianos que ofrecen una mirada original a la moralidad y la sociedad.
La novela se desarrolla en el siglo XXIII. Nontraditional Love describe un mundo homosexual donde está prohibido el matrimonio entre personas de sexo opuesto. La sociedad homosexual no tolera los disidentes. Se rechaza la intimidad entre los sexos.
La historia mundial y los clásicos de la literatura universal se han falsificado a modo de sustentar la ideología en este mundo contrapuesto.
En el corazón de la novela se encuentra una historia de amor entre un hombre y una mujer que se ven forzados a ocultar sus sentimientos y pasar por homosexuales.
Esta novela satírica, que entrelaza ingeniosamente la fantasía erótica y un delito, es un llamado manifiesto para que nuestras políticas sean más tolerantes, acepten y respeten el derecho de los individuos de ser ellos mismos. Cualquier prohibición extrema que se imponga sobre ese derecho puede tener como resultado una realidad trágica y absurda, semejante a la que describió George Orwell en su profética novela 1984.
Recepción de la crítica[]
Mariano Rodríguez, Ph. D. y miembro del grupo de investigación HISTOPIA (Universidad Autónoma de Madrid) dedicado a las utopías y la historia futura afirmó: «Es posible dudar si la celebración de la persecución hipotética de la heterosexualidad es un símbolo del derecho a la diferencia en distopias homosexuales posteriores... Entre ellas, existe una relativamente reciente, Nontraditional Love, de Rafael Grugman, escrita en ruso y traducida al inglés en 2008. Como es el caso en ejemplos anteriores sobre la dominación homosexual, al menos a partir del «El jorobado», el héroe-víctima heterosexual masculino debe aceptar el hecho de que es parte de una minoría rechazada, por tanto, él y su pareja femenina deben ocultar su amor mediante acuerdos familiares con otras parejas que comparten su modo de pensar y orientación sexual. En esta tierra del futuro, un accidente global hizo que la mayoría heterosexual se volviera homosexual, al igual que sus descendientes, mientras que los homosexuales tornaron heterosexuales, causando así una inversión total. La maternidad biológica debió ser sustituida por la subrogación gestacional tanto para parejas gay como lesbianas, las que hoy constituyen la mayoría. Desafortunadamente, la homofobia generalizada se ha transformado en heterofobia generalizada. A excepción de Holanda y sus colonias, la heterosexualidad se combate...»
Según Rodríguez: «De manera consciente o inconsciente, la narrativa de Grugman sintoniza con el discurso contra la autoafirmación de los gay y las lesbianas que subyace en la legislación que restringe lo que se percibe como proselitismo gay... Por tanto, la homosexualidad se presenta como una amenaza para la sociedad en su conjunto, y en su distopia, Grugman convierte esta amenaza en realidad. En cualquier caso, Grugman ofrece un espécimen tardío sobre una utopía antigay en un período donde la homosexualidad ha prácticamente desaparecido del género utópico, a excepción de algunas apropiaciones puntuales de los propios gay, luego de un largo silencio en el armario».
Debbie Pope señala en su artículo The freedom of a genre: Sexuality in speculative fiction (La libertad de un género: la sexualidad en la ficción especulativa) de Lateral Magazine: «Como otro giro de tuerca a la sociedad actual, la novela Nontraditional Love de Rafael Grugman (2008) crea un mundo al revés donde la heterosexualidad está prohibida y la homosexualidad es la norma. Una familia «tradicional» consiste en dos padres y una madre subrogada. Si la familia se compone de dos madres, una de ellas es quien da a luz al hijo. En reconocimiento a Holanda —país siempre progresista— se hace referencia a ella como la única nación lo suficientemente progresista para permitir el matrimonio entre personas del sexo opuesto. Esto quizás sea el ejemplo más claro del enajenamiento cognitivo. Hace que el lector sienta empatía por los oprimidos al crear todo un mundo al revés que gira alrededor de la existencia cotidiana de un protagonista heterosexual bastante «normal». El lector heterosexual no solo podrá identificarse con el personaje principal, sino que también se sumergirá en un mundo que es tan opresivo e intolerante como lo ha sido nuestro mundo a lo largo de la historia hacia los homosexuales y la comunidad «queer».
